| En el año 1991 hubo una importante restricción gubernamental llamada Límites espaciales y ambientales a la minería de lignito. El propósito de la restricción fue establecer límites a la minería de lignito para permitir la transición de la economía de la región y minimizar los costos sociales de cerrar las minas de inmediato. Al mismo tiempo, los límites también estaban destinados a proteger los asentamientos cercanos a la mina de ser demolidos para ampliar la mina operativa. Sin embargo, la restricción gubernamental fue impugnada más adelante por las compañías mineras. Y la ciudad de Horní Jiřetín se convirtió en una fortaleza de la resistencia a los planes de extensión de la minería, porque se encuentra en el borde de la mina del ejército checoslovaco y su extensión significaría la demolición de la ciudad. En el año 2005, los habitantes organizaron un referéndum local, donde el 96% de los votantes votaron por el municipio para proteger a la ciudad de la demolición o la reubicación. Diez años después, en 2015, el Gobierno discutió un nuevo documento estratégico, la política de energía estatal. El Ministerio de Industria y Comercio propuso varios escenarios de la minería de lignito, que contaron con la extensión de los límites de minería. No solo los habitantes de Horní Jiřetín, sino también la sociedad cívica y la ONG nacionales se movilizaron contra la propuesta a través de los acontecimientos públicos, sino también al recopilar firmas bajo "promesa de desobediencia civil en caso de violar los límites". Se entregaron alrededor de 3,000 firmas al Ministro de Finanzas y Ministro de Medio Ambiente antes de la reunión del Gobierno. Y el gobierno, sin embargo, decidió violar parcialmente los límites de minería en una de las tres minas operativas en el área - Bílina, donde no requirió la eliminación de los asentamientos. La movilización para mantener los límites también dio lugar a la Línea de Movimiento de Movimiento de base JSME MI - Somos los límites. Este movimiento argumentó contra la minería del carbón desde una perspectiva de la justicia climática, y en red con el movimiento internacional de la justicia climática. En junio de 2017, organizó el primer campamento climático internacional checo en Horní Jiřetín. Durante el clima, los participantes ingresaron a la mina de carbón Bílina y así bloquearon las operaciones por un día. Y |